Entrada cero

Llevo mucho, mucho tiempo divagando sobre la posibilidad de crear algún tipo de contenido en Internet. He considerado crear un blog, un vblog, un canal de podcast, de youTube, de TikTok… hay tantas posibilidades hoy en día que abruman. 

Como consumidor de contenidos me he dado cuenta del grave inconveniente que tienen los formatos de audio y de video, en caso de error, es complicado hacer una corrección a posteriori. En el caso de un video, se podría añadir el típico subtitulo en el momento preciso con la aclaración oportuna. Esto es más complicado en el formato de audio de un podcast ya que no queda otra que esperar a otro episodio para hacer una enmienda o aclaración a lo comentado en un podcast anterior. Así pues, decidido, me decanto por el blog donde la corrección-aclaración es más fácil de hacer en cualquier momento, además de la facilidad de añadir imágenes, enlaces, etc.

El siguiente paso sería preguntarse ¿de qué va a hablar mi blog?, un blog, un canal cualquiera debe tratar de un tema o un área concreta para captar una audiencia concreta, tratar de cocina, bricolaje, informática, moda, tecnología, maquillaje… puf. Y hete aquí el otro motivo de la demora en este propósito de crear un blog, ¿cómo podría decantarme entre perros y gatos o entre cruasanes y magdalenas? Así pues, voy a optar por hablar de cualquier tema, aunque me temo que va a tratar de consejos, sugerencias, opiniones de temas que importan (al menos a mí), con una periodicidad aún por determinar (posiblemente quincenal) y con una extensión media para que no resulte tedioso para el suscriptor el seguimiento del blog. 

Sin más que añadir, allá voy, deseadme suerte.